Vía costarricense
Johnny Soto Zúñiga
Los Estados Unidos de América recién estrena un nuevo gobierno con su Presidente N°46 Joe Biden, del Partido Demócrata; que retorna a la Casa Blanca ya que antes fue Vicepresidente en la era de los 8 años de la administración de Barack Obama. Es fundamental conocer cual va a ser la política regional internacional del nuevo gobierno; ya que en el mundo de la globalización y las relaciones interdependientes de Costa Rica y toda América Latina prácticamente ha sido una realidad desde inicios de la independencia en el Continente Americano y el Caribe. Sigue siendo EE.UU. así como Canadá y México nuestros países hermanos del norte. La inversión estadounidense y las exportaciones e importaciones es una constante en nuestros países; así como la inmigración de los latinos hacia EE.UU. a través de los años que salen de sus países a buscar trabajo, una mejor calidad de vida y perseguir en su mente el denominado “sueño americano”.Siempre que existe un cambio de gobierno en EE.UU. esperamos se establezca una nueva “alianza con Latinoamérica”; por lo general se realiza una Cumbre con el fin de discutir los objetivos e intereses comunes. Considero que los temas prioritarios de seguridad y cooperación, derechos humanos, el medio ambiente y cambio climático, la lucha contra el crimen organizado, etc., deben tomarse las acciones en el marco de un mayor fortalecimiento en los Órganos Internacionales y las relaciones diplomáticas, el respeto al derecho comercial internacional; políticas exteriores muy venidas a menos y debilitadas por el anterior gobierno de Trump. EE.UU. regresa al mantenimiento y apoyo a la Organización Mundial de Salud; al Acuerdo de París sobre el Cambio Climático y de otros tratados y acuerdos internacionales; que son fundamentales para el equilibrio internacional; de los cuales EE.UU., juega un papel fundamental de apoyo financiero y político.
EE.UU. se caracteriza por su ayuda externa a Latinoamérica; y casi siempre en los Gobiernos del Partido Demócrata el apoyo en el comercio y ayuda social ha sido evidente durante décadas. Aunque no somos la prioridad número uno a nivel mundial; sin embargo, toda ayuda estadounidense se convierte para Latinoamérica de primer orden; por ejemplo, con las reformas inmigratorias que puedan adoptar es un aliciente para nuestros hermanos que viven en el país del norte. Desde el Gobierno de Obama se planteó una reforma integral que viniera a legalizar a los millones de indocumentados y la promoción del desarrollo económico para la región; en especial México y América Central (que incluso actualmente se vive una inmigración de miles de hondureños y de otros centroamericanos que desean ingresar a EE.UU., lo cual debe buscarse una real solución).
Esperemos que se fortalezca la Organización de Estados Americanos (OEA), para que exista una real política exterior de EE.UU. en el marco de las relaciones tanto bilaterales como multilaterales; y además se busque el apoyo de la comunidad internacional; incluso donde se analicen y se tomen decisiones y un giro sobre Cuba, Nicaragua, Venezuela y otros países latinoamericanos, donde el gobierno de Trump no le dio importancia o echó para atrás las políticas adoptadas en el gobierno de Obama y del cual el presidente Biden conoce muy bien sobre la política exterior regional y el denominado “traspatio” continental, los retos y desafíos tanto de EE.UU. como de América Latina. Por el momento este nuevo gobierno de Joe Biden apenas inicia labores; pero es importante es que el presidente conoce muy bien la región y esto ayuda en la toma de decisiones más rápidas como es el respeto a los derechos humanos y es posible se incremente una “presión” sobre los gobiernos de regímenes autoritarios.
El Gobierno de Costa Rica y su Cancillería han afirmado que esperan trabajar con EE.UU. en los temas de derechos humanos, cambio climático y la recuperación económica. Incluso el país fue uno de los primeros en felicitar el triunfo de Biden y su Vicepresidenta Kamala Harris, “deseándoles una gestión exitosa y la confianza que este nuevo capítulo de la relación bilateral entre ambos países traiga consigo mayor bienestar para todas las personas”; incluso con los sucesos del Capitolio en Washington del 6 de enero del 2021 así: “Se condena todo acto de violencia que interfiera con el sano desarrollo del sistema democrático”.
Incluso se ha informado los cambios en la misión estadounidense en Costa Rica: “Profundizar la cooperación entre Estados Unidos y Costa Rica en temas como seguridad, educación, agricultura y turismo será la prioridad de Gloria Berbena, quien fungirá encargada de negocios de ese país norteamericano en suelo nacional. La diplomática también unirá esfuerzos con la administración costarricense en la lucha contra la Covid-19. “Es costumbre que un diplomático de carrera asuma el control de la embajada hasta la llegada del siguiente embajador, quien debe ser nominado por el presidente Biden y confirmado por el Senado de Estados Unidos” informaron en la misión norteamericana (Fuente: La República. 31-01-21)
En lo referente a Latinoamérica, el Presidente Biden nombró a Juan Sebastián González, oriundo de Colombia, como su Asesor de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental; y entre las nuevas políticas están: 1-Promete darles, a los que inmigraron cuando eran niños, la oportunidad de adquirir la ciudadanía estadounidense. No obstante, se indica que el gran problema es la frontera con México; que día con día atraviesan el río Colorado y otros lugares de entrada a EE.UU.; pero se tienen establecidas medidas en esa frontera; que algunas veces son más flexibles y otras más rígidas o duras; eso lo vamos a ir observando conforme avance este nuevo gobierno. Biden quiere acelerar el proceso de asilo para que haya más solicitantes y ha destinado un total de cuatro mil millones de dólares a ayudar a los gobiernos de Centroamérica para controlar la pobreza, la violencia; y así evitar la inmigración hacia el país del norte. También quiere colaborar en el ataque contra la pandemia del coronavirus Covid-19.
Finalmente el nombramiento del nuevo Secretario de Estado Antony Blinken; quien ha sido confidente y colaborador de Joe Biden, ha servido a dos presidentes demócratas y fue miembro fundamental en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, y también ejerció como Asesor de Seguridad Nacional y secretario de Estado adjunto en la segunda administración de Obama; por lo tanto es un conocedor de la política exterior y las relaciones bilaterales y regionales a nivel mundial y conoce los temas más complicados de América Latina; por lo que esperamos que exista un mayor acercamiento y acompañamiento para entrarle a los problemas más álgidos de la región. Por ahora existe esperanza con el inicio de este nuevo gobierno demócrata y cuyo Presidente Joe Biden no lo vemos lejano tanto de Costa Rica como del resto de América Latina; y esperar que su política exterior sea para el bienestar de todos los ciudadanos que vivimos en este Continente Americano.