Los museos del futuro

Fernando Berrocal

Fernando Berrocal Soto

Allá por los años setenta del siglo pasado, cuando pocos pensaban en estas ideas trascendentales, un visionario costarricense se empeñó en un programa de Parques Nacionales y dijo que esos “parques serían los museos del futuro”. Ese costarricense fue Daniel Oduber.

De él escribió Henry Kissinger, el famoso Secretario de Estado que negoció la paz y terminó la guerra de los Estados Unidos en Vietnam, que este costarricense era el político más sobresaliente y capaz de Centroamérica.

El país así lo ha reconocido y la Asamblea Legislativa declaró a Daniel Oduber Benemérito de la Patria y un monumento a su memoria se eleva en el parque Morazán, cerca de la Escuela Buenaventura Corrales y los barrios Amón y Otoya, en donde vivió su infancia y su juventud de enamoradizo conquistador, bailarín de tango y hasta escritor y poeta. Ahí celebramos sus 100 años.

De formación académica excepcional, además de abogado y Doctor en Filosofía por la Universidad de MacGill en Canadá y La Sorbona en Francia, fue de esos intelectuales que se metió sin miedo al barro y se fue, incansablemente, por todos los caminos de Costa Rica a defender sus ideas.

Eso le deparó grandes amigos y seguidores, pero también terribles enemigos y adversarios políticos que nunca le perdonaron su firmeza ideológica, ni la fuerza de su verbo de insigne orador. Tanto que cuando muchos decíamos: “Voy con él… con Daniel”, otros contestaban y afirmaban que “Un voto por Daniel… es un voto por Fidel”, en aquellos inolvidables, confrontativos y formidables años 60 y 70 del siglo pasado.

Su propio partido político fue muy ingrato y, por razones electoreras, le pidió que se apartara de sus altos cargos de dirección, en medio de un escándalo falso que le montó un sector de la prensa nacional que lo confrontaba y detestaba. Me honra de por vida haber sido, junto al viejo Villanueva Badilla y Guillermo Constenla, los únicos tres miembros que vertical y lealmente nos opusimos a esa infamia, en aquella imperdonable reunión del Directorio Político y el Comando de Campaña, en ruta hacia las elecciones del año 1990.

Hoy los Parques Nacionales son un orgullo nacional, nos singularizan en el mundo como país y son los museos de fauna, flora y exuberancia vital y tropical que visitan más de un millón de estadounidenses, canadienses y europeos.

Igual que la universalización de los Seguros Sociales que se realizó en su visionario gobierno de 1974 a 1978. Así como la firme política de justicia y equidad social con los sectores más desposeídos de nuestra sociedad, por medio de Asignaciones Familiares y el IMAS que el presidente Daniel Oduber emprendió con determinación, junto a su ministro de Trabajo Francisco Morales, para fortalecer aún más nuestro Estado Social de Derecho.

Daniel Oduber, con ideas que se adelantaron a su tiempo, diferenció y engrandeció a Costa Rica, haciendo Patria. ¡Honor a quien honor merece¡

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