Las convenciones y el debate de ideas

Vía costarricense

Johnny Soto Zúñiga

Durante estos meses hemos observado que la mayoría de los partidos políticos realizan sus convenciones internas o primarias para elegir a su respectivo candidato (a) presidencial. Esto es producto de una democracia y sistema de partidos políticos consolidado como el nuestro y es positivo. Las convenciones internas se dan cuando no existe un candidato único de consenso; entonces el partido político se ve obligado a convocar a unas elecciones preliminares que muchas veces sirve de entrenamiento para “aceitar la estructura” compuesta por sus dirigentes que mueven los votos en cada uno de los cantones y que a su vez están integrados por cada uno de los distritos administrativos o electorales. Muchas veces los partidos políticos realizan en conjunto las asambleas distritales con la convención para elegir a su candidato; esto con el fin de reducir costos y el desgaste político que implica realizar varios procesos electorales.

Conforme al Código Electoral en nuestro país el monopolio de proponer a los candidatos lo tienen los partidos políticos; lo que no se hace posible convertirse en candidato fuera de ellos. La estructura administrativa y jurídica es mediante el partido político; que se auto regula y tiene la potestad de convocar a una convención o elección completamente abierta donde vote cualquiera, o una convención de índole cerrada donde voten solamente sus militantes. Por lo general los partidos políticos de los denominados grandes: Partido Liberación Nacional (PLN), Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Partido Acción Ciudadana (PAC) y otros, etc., por lo general realizan sus convenciones completamente abiertas; donde el único requisito previo a ejercer el voto es firmar una adhesión inserta o no en las Juntas Electorales. En nuestro país estamos acostumbrados a elecciones completamente abiertas independiente de la afiliación partidaria; por lo que vemos a liberacionistas, social cristianos o pacistas votando en las distintas convenciones internas de los partidos políticos; esto producto de que no existe un gran respeto por la afiliación.

Sobre la propaganda electoral transcribo lo que expresa el escritor Maurice Duverger: “Hay que distinguir, además, la propaganda electoral propiamente dicha, hecha por el candidato para tratar de ser elegido, y la propaganda del partido en las elecciones, que tiende a difundir su doctrina, a extender su radiación, a multiplicar sus miembros. Una curiosa evolución se ha producido en este terreno, que traduce la transformación de la naturaleza de los partidos y de su papel. Los primeros partidos fueron organizaciones puramente electorales, cuya función esencial consistía en asegurar el éxito de sus candidatos: la elección era el fin; el partido, el medio. Luego el desarrollo de las funciones propias del partido, como organización capaz de actuar directamente en la vida política, condujo a utilizar la elección al servicio de la propaganda partidista.

Una campaña electoral ofrece medios de acción excepcionales sobre la opinión: en algunos países los candidatos tienen derecho a salas de reuniones gratuitas, a la impresión y distribución de sus programas por los servicios oficiales, a la utilización de la radiodifusión nacional, a tableros para anuncios, etc. Por otra parte, el público se encuentra en un período de receptividad particular en relación con la política: jamás ha estado mejor preparado el terreno para desarrollar la virulencia de los microbios partidistas. Persiguiendo la propaganda electoral de su candidato, el partido ha desarrollado progresivamente, pues, su propaganda propia. En el extremo, la situación primitiva ha sido invertida: en lugar de utilizar a los partidos para asegurar el éxito de las elecciones, se han utilizado las elecciones para asegurar el crecimiento de los partidos; el partido se ha convertido en fin y la elección en medio. (Los partidos políticos. Maurice Duverger. Págs. 392 y 393)

Lo más importante a destacar es que en las convenciones internas se produce un debate de ideas sobre los problemas y las posibles soluciones para el país; lo que hace que sea positivo; así el elector pueda analizar los posibles programas de los partidos políticos, y finalmente sean presentados en las elecciones nacionales del primer domingo de febrero del 2018. Cabe destacar que los medios de comunicación, universidades y otras instituciones han contribuido a la divulgación y el debate de las ideas de los candidatos; que tienen sus discrepancias y coincidencias en los diferentes aspectos sociales, económicos y políticos del cuál debe el rumbo del país. Estos programas supuestamente serán ejecutados por los candidatos si logran obtener el triunfo electoral y si responde realmente a las ideas y propósitos políticos previamente establecidos. Muchas veces cuando no se ejecutan; se sigue perdiendo la credibilidad en los políticos.

Se considera que los programas de los partidos políticos deben ser estratégicos; fijar las metas finales o políticas públicas integrales para la solución de los problemas del país; su desarrollo y proponer un crecimiento del país. Muchos ciudadanos están esperando que los partidos políticos tengan las ideas que realmente den las soluciones. Sabemos que existen todos los diagnósticos y una serie de análisis de donde están los problemas del país; y los ciudadanos realmente desean que les hablen con la verdad; y lo más importante no se sientan engañados cada cuatro años; de escuchar en las campañas electorales múltiples promesas y a la hora de estar en el poder; lo ejerzan de manera positiva. Ya no se justifica expresar que el país es ingobernable; si bien existen estructuras legales e institucionales que puedan hacer engorroso el gobernar; si existen suficientes elementos del que pueda echar mano un gobernante y su estructura partidaria, cuando ejercen el poder político.

Otro de los aspectos que en estas fechas se están analizando de parte de los que llevan las estadísticas, encuestas, y les gusta la ciencia política; es si es relevante el número de votantes que asisten a las convenciones internas. Por ejemplo en el PLN y el PUSC; por lo generan están acostumbrados a llevar bastantes electores a las urnas; inclusive tratan de abrir las juntas electorales en prácticamente todos los distritos del país. El PLN es el de mayor organización como un partido de masas con más de 400.000 electores; pero vemos que esto no le alcanza para ganar unas elecciones nacionales; contrario al PAC que en la convención pasada que eligió como candidato al Presidente de la República actual Luis Guillermo Solís (que obtuvo el triunfo interno en una convención que votaron 23.000 votantes) y su triunfo final en las elecciones nacionales fue de 1.300.000 electores.

Se concluye, que llevar muchos votantes en una convención interna prácticamente no se puede sacar conclusiones finales de obtener el triunfo final; y apenas nos quedaríamos en el medio apenas para ser candidato; pero lo que vale es la simpatía y encantamiento tanto del candidato presidencial; como de la credibilidad que impregne su programa de gobierno. Que la gente en realidad crea que las mejores ideas se podrán poner en práctica; una vez llegado a ocupar el poder político. Los partidos políticos deben tener la capacidad de leer los signos de los tiempos; los cambios rápidos en una sociedad moderna son constantes; así como los problemas, algunos viejos y otros nuevos; deben tener una respuesta inmediata. La opinión pública se transmite de forma inmediata a través de las redes sociales; y es una variable o instrumento relativamente nueva; y sin duda esta campaña pasará por el tamiz principal de dichas redes tecnológicas; donde todos tenemos derecho a opinar, criticar, a proponer y dar ideas de lo creemos pueda ser el rumbo del país.