Douce France chèr pays de mon enfance

Monólogos con Pelé *

Lina Barrantes

Lina Barrantes Castegnaro

La semana pasada una serie de atentados terroristas golpeó Paris. Atentados yihadistas que buscan su justificación en ofensas al profeta.

Como dice Baltazar Garzón: “En Paris hemos visto de nuevo consumada la sinrazón de la barbarie; el terror no olvida y es cobarde frente a quienes difunden ideas diferentes o le hacen frente.” Sin embargo mi reflexión no va por el lado de analizar las posibles respuestas democráticas en contra del terrorismo, sino que es mas bien una reflexión personal.

Para mi, un golpe a Paris, es un asunto personal. Durante toda esta semana, he sentido un desgarro cada vez que leo noticias, cada vez que veo los videos.

Paris para mi, es aquel lugar maravilloso, donde como dice Colette, es la única ciudad del mundo donde ni siquiera es necesario ser feliz. Es la ciudad que lo tiene todo, que lo llena todo.

Sin embargo y dejando de lado eso, que significa Francia? Francia es la cuna de todos los ideales en los que creo. No solo los de la Revolución Francesa, universalmente aceptados (Libertad, Igualdad, Fraternidad), sino también ideales como tolerancia, irreverencia, respeto al otro. Todo eso, en mi caso, lo aprendí desde muy pequeña. Hace 45 años, mi hermana -cinco años mayor que yo- y mis papás (yo era muy pequeña) tomaron una decisión que impactaría mi vida: decidieron que ella y yo estudiaríamos en un colegio no bilingüe, sino binacional, seríamos matriculadas en mi caso, desde la escuela, en el Liceo Franco Costarricense.

En ese colegio, aprendí mucho mas que un idioma. Aprendí mucho mas que la lógica cartesiana. Mucho mas que la historia y geografía europeas. En el Liceo Franco Costarricense, y luego en los cuatro años en que tuve la suerte de vivir en Paris, aprendí a cuestionarme a mi misma y a mi entorno. Aprendí que se puede disentir de cualquier idea o persona, siempre y cuando se argumente. Aprendí a argumentar. Aprendí a respetar el pensamiento del otro, mas que al mío propio, aprendí a decir lo que pienso siempre, y que eso nunca debe tener consecuencias. Aprendí a decir siempre “mi verdad”. Aprendí a valorar a los seres humanos en función de lo que son, y de lo que piensan.

Los actos terroristas de la semana pasada, me han revuelto todo esto. Por eso para mi lo que está sucediendo en Francia es algo personal y no he podido dejar de pensar en ello durante todos estos días. Tampoco he podido dejar de agradecer a esa Francia, como dice la canción: dulce país de mi infancia, todas sus enseñanzas. Una muy buena parte de lo yo soy, se lo debo a esa cultura maravillosa, maravillosamente libre, diversa, y tolerante que es la cultura francesa.

EVALUE ESTA COLUMNA
1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (1 votos, promedio: 5,00 de 5)
Cargando...

* Pele fue mi perro, un beagle. Durante 10 años, escuchó pacientemente las reflexiones que de vez en cuando decidí poner en blanco y negro. Por su complicidad, decidí poner este nombre a la columna.

Revise también

Ana Ruth Quesada

Mi reclamo del PLN a Dios

Ana Ruth Quesada B. La madrugada de hoy, mientras hacía un tiempo de meditación y …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *