Vía costarricense: El Museo Histórico Cultural Juan Santamaría

Joanny Soto

Johnny Soto Zúñiga

El 11 de abril es el día de la celebración costarricense sobre los acontecimientos históricos de la Campaña Nacional de 1856 – 1857, también conocida como la Gran Guerra Patria liderada por el Presidente de la República Juan Rafael Mora Porras y que tiene como a su héroe nacional al soldado alajuelense Juan Santamaría.

La lucha fue cruenta y difícil contra los filibusteros invasores estadounidenses comandados por William Walker, constituyéndose en una epopeya del pueblo costarricense para expulsar del suelo centroamericano a los invasores que se habían apoderado del país hermano y vecino del norte – Nicaragua -, y amenazaban con apropiarse de toda la región.

El cantón de Alajuela es la sede del Museo Histórico Cultural Juan Santamaría, creado mediante Ley N° 5619 de fecha 4 de diciembre de 1974, adscrito al Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes, donde se conservan reliquias, documentos y armamento referentes a esta Campaña Nacional, así como la recuperación y conservación del Patrimonio histórico, se encuentra frente al costado norte del parque central de Alajuela en la antigua cárcel de Alajuela y antiguo Cuartel de armas de la ciudad construidos ambos en el siglo XIX. Se dan exposiciones permanentes y temporales de promoción cultural, además publica libros y documentos históricos importantes.

También en el centro de Alajuela está erigida desde 1891 la estatua en honor al Héroe Nacional Juan Santamaría, quién finalmente incendió el Mesón de Guerra en Rivas de Nicaragua, que albergaba el grueso de las fuerzas enemigas, logrando acabarlas. El insigne profesor e historiador Rafael Obregón Loría, ha realizado varias contribuciones en beneficio del Museo, como donar a esta institución todos los derechos de la edición de 1981 sobre su libro “Hechos Militares y Políticos”, donde narra y explica los acontecimientos del país desde su fundación e independencia en 1821.

Asimismo narra Obregón Loría: la primera guerra civil, diferentes golpes de Estado, la invasión de Morazán, la Campaña contra los filibusteros, la Revolución del Sapoá, el golpe de Estado de Federico Tinoco, el conflicto con Panamá, el Bellavistazo, todos los hechos de la década de los 40s del siglo XX, hasta culminar con la Guerra Civil de 1948 donde triunfa el Movimiento de Liberación Nacional liderado por el Caudillo don José Figueres Ferrer.

Se sigue con las invasiones de Nicaragua en 1948, 1949, 1955, apoyando a los calderonistas vencidos en la guerra civil, que querían retomar el poder y derrocar al Presidente Figueres Ferrer y termina en 1970 con la jornada patriótica de la lucha contra ALCOA – transnacional que quería explotar yacimientos de bauxita en el país que hubiera causado enorme daño ambiental, y que también recordamos el 24 de abril cuando los estudiantes de la Universidad de Costa Rica y de colegios de segunda enseñanza se manifestaron fuertemente contra este proyecto de ley que se discutía en la Asamblea Legislativa y que finalmente la explotación no se llevó a cabo.

Don Rafael Obregón, también editó una investigación profunda de las familias alajuelenses por orden alfabético, que por cierto me ha servido para adentrarme en el estudio de mis ancestros familiares de los apellidos Soto y Vargas en los cantones de Alajuela y Poas, siendo que mis bisabuelos y tíos emigraron a la zona del cantón de Vázquez de Coronado, para dedicarse a la ganadería de leche. Para los que deseen conocer de sus orígenes en Alajuela, es vasta la investigación que hace don Rafael.

Deseo terminar esta conmemoración recordando la narración escrita por don Rafael Obregón sobre los hechos de la Campaña Nacional: “En la madrugada del 4 de marzo de 1856 salieron nuestras primeras tropas para la frontera a través de la provincia de Guanacaste, e iban al mando del general don José Joaquín Mora. Ya habíase establecido en Liberia un Cuartel General bajo las órdenes del general don José María Cañas.

Al conocer la actitud de Costa Rica, fuerzas filibusteras pasaron la frontera e invadieron nuestro territorio llegando hasta la Hacienda Santa Rosa. Allí las encontró el veinte de marzo la vanguardia del ejército costarricense, y después de un encarnizado combate, las hicieron desalojar la posición y salir huyendo hacia Nicaragua….

Después de esta victoria el ejército costarricense prosiguió su marcha hacia el norte, y el 29 de marzo atravesó la frontera dirigiéndose a Rivas, población que fue ocupada. Al mismo tiempo, fueron enviadas dos fuerzas, la primera al mando del coronel don Santos Mora, a ocupar el puerto de San Juan del Sur, en el Pacífico; y la segunda, al mando del teniente coronel don Juan Alfaro Ruiz, a ocupar el puerto de la Virgen, sobre el Lago, lo que se realizó después de sostenerse un combate…

Enterados los filibusteros de que Rivas estaba ocupada por los costarricenses, cayeron de sorpresa en esta ciudad en la mañana del día 11 de abril, fortificándose en los principales edificios. Sangriento fue este combate, ocasionando el enemigo gran número de bajas en nuestras filas. El grueso de las fuerzas enemigas se había albergado en una casa fuerte y grande conocida con el nombre de Mesón de Guerra, y para desalojarlas de allí, un soldado alajuelense llamado Juan Santamaría, incendió heroicamente el Mesón.

Walker entonces se refugió en la iglesia con los suyos, y en las horas de la madrugada del día siguiente abandonó la ciudad de Rivas…Pocos días después apareció el cólera, y nuestras tropas al retirarse apresuradamente de Nicaragua, trajeron la peste al interior del país donde causó estragos, muriendo a consecuencia de ella cerca de diez mil personas.” (Hechos Militares y Políticos. Rafael Obregón Loría. Pág. 108, 110, 111)

Así se convirtió en nuestro Héroe Nacional el humilde soldado alajuelense Juan Santamaría, que con su valentía, tesón y sacrificio de su vida, pudo cambiar el destino de la guerra contra los invasores extranjeros y poder gozar hoy día de la libertad, independencia y República democrática, donde no es el yugo extranjero quien nos dicta el camino; sino con orgullo y regocijo de ser libres podemos conmemorar todos los 11 de abril, con desfiles estudiantiles la gesta heroica de Juan Santamaría, el Presidente Juan Rafael Mora Porras y todos los costarricenses que ofrendaron su vida en esta Campaña Nacional en 1856 – 1857.

Invito a todos los costarricenses y extranjeros a visitar el Museo en el centro de Alajuela, para conocer, recordar y comprender nuestro patrimonio cultural de la historia republicana que es parte del alma costarricense.

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