Anecdotario Nacional

EL CORONEL don Leoncio Bonilla, en el desempeño de su delicado cargo de Jefe de la Casa Militar en el Gobierno del Licenciado don Cleto González Víquez, recibió un telegrama del Jefe del Resguardo de la frontera con Panamá, en que decía que estaban desembarcando armas y hombres para derrocar al Gobierno legalmente constituido. El Coronel Bonilla, sin acatar que ya era casi la madrugada, fué al dormitorio del señor Presidente de la República y al despertarlo de un sueño profundo, le mostró el mensaje telegráfico. Don Cleto lo leyó y sin musitar palabra siguió descansando. El Coronel Bonilla, muy preocupado, regresó su oficina de la Comandancia en Jefe en espera de nuevos informes telegráficos. Ya casi a la hora en que el señor Presidente acostumbraba levantarse (las 5 de la mañana), la Casa Presidencial recibe del Jefe del mismo Resguardo otro telegrama concebido en estos o parecidos términos:

—“El desembarco que se hizo fué de mercadería de contrabando. Capturados los contrabandistas y puestos a la orden de la autoridad competente”.

Cuando el Coronel Bonilla se lo mostró a don Cleto, éste dijo:

—“HICE BIEN EN SEGUIR DURMIENDO”…

Tomado del Anecdotario Nacional de Carlos Fernández Mora. Dibujante: Noé Solano V.
Usado con permiso. Todos los derechos reservados.